domingo, 26 de mayo de 2013

Nueva publicación de La Pereza Ediciones


Bajo el sello de La Pereza Ediciones, acaba de publicarse en Estados Unidos la primera novela del joven escritor colombiano, Julio César Pérez Méndez, "Hombre Cero".
Aquí, el link de acceso de una breve entrevista realizada a este autor, a quien auguramos grandes éxitos en su carrera literaria.

lunes, 20 de mayo de 2013

Lanzamiento oficial de dos poemarios publicados por La Pereza Ediciones




Juventud, talento, frescura. Todo esto y más se reunió la tarde del 19 de mayo en The Place of Miami. Pese a lo temprano del horario, a La Pereza Ediciones sorprendió la gran afluencia de público y lectores interesados en el lanzamiento oficial de "Corazones bajo las pestañas", ópera prima de la nueva voz lírica Patricia Serra; y de "Otro canto", poemario que cuenta con la presencia de Les Urdanivia. La presentación estuvo a cargo de Greity González Rivera, Presidente en La Pereza Ediciones.

A todos gracias por su presencia, por el apoyo, y por esa deliciosa pereza que se respiró minuto a minuto.


De izquierda a derecha, Patricia Serra y Greity González

De izquierda a derecha, Leslie Urdanivia, Greity González y Patricia Serra

jueves, 16 de mayo de 2013

CÓMO, DÓNDE Y POR QUÉ ESCRIBÍ “¡CUIDADO! …NIÑA EN EL JARDÍN…”


 
Geovannys Manso

No recuerdo el día exacto, pero sé que regresábamos de unas vacaciones, cerca del mar. Llegué a casa rejuvenecido y con muchísimos deseos de escribir. Habitualmente, mis textos surgen de brevísimos rafagazos que ignoro de dónde provienen, pero a ratos despierto con el núcleo esencial de una historia y luego, va tomando forma tras horas y horas de trabajo. Solo recuerdo que recibí, de golpe, a estos dos personajes: una niña, cuyo nombre era Violante y su gato siamés (Arnaldo el Aventurero). Por aquella época no tenía PC, así que las teclas de mi máquina de escribir comenzaron su ardua tarea de configurar la trama de esta novela. Como casi siempre ocurre entre escritores, mi esposa (Lisy García) ha adquirido la costumbre de leer en las mañanas lo que escribo el día anterior, y cuando leyó los primeros capítulos, se entusiasmó tanto que casi me obligaba a escribir, mientras esperaba atenta el resultado.

Terminé la primera versión un mes o dos después. Lo habitual era que, tras culminar un capítulo, ya tenía completamente desarrollado el siguiente, anotándolo rigurosamente en una hoja muy cerca del borrador.

Yo, de forma consciente, jamás había escrito una novela para niños. Había estado muy ocupado con la novela, el cuento, la crítica de cine, el ensayo, pero supongo que existe una fuerza oculta en ciertos personajes que te obligan a modelarlos y hasta que ese arduo trabajo no culmina, no puedes descansar.

Es un hecho: si estoy incubando una novela: mi ánimo cambia, me torno irritable, me atrapa el insomnio, me convierto, más de lo habitual, en un ermitaño irreductible: cero llamadas, cero encuentros, cero conversaciones. De esos ánimos irascibles que me acompañan, surgió una novela titulada: “Los hijos soñolientos del abismo”, aún inédita, que obtuvo Mención en el Premio Casa de las Américas 2011.

Lo cierto es que “¡Cuidado!…niña en el jardín…”, me permitió explorar un universo totalmente desconocido para mí y sensibilizarme con procesos creativos más lúdicos, ejercitando todas las posibilidades de lo inaudito.

Yo escribo sin crearme expectativas, siempre al margen de tendencias o sofismas. Soy fiel, y siempre lo seré a esos “rafagazos” que me llevan a comenzar una historia sin tener muy claro, casi nunca, su destino final. De esa pequeña burbuja se va nutriendo cada novela que he escrito y que, espero, escribiré en el futuro.

Aún conservo ese primer borrador “a máquina de escribir”.

Cinco años después de escribir y dar vida a este personaje, nació mi hija, y no dudé ni un instante en llamarla así: Violante. Ya sé que es un nombre extraño, pero espero que mi hija me perdone haberla nombrado como a uno de mis personajes…

Muchas veces, he querido alejarme de la escritura de libros para niños. No porque considere que es algo banal, sino porque deseo encausar mi obra hacia otros destinos, pero me ha resultado del todo imposible.

Solo espero que, tal y como ha sucedido en Cuba, tanto Violante, como su gato: Arnaldo el Aventurero, complementen la vida y la imaginación de muchísimas familias alrededor del mundo. Si esto ocurre, estaré más que orgulloso de ser ESCRITOR…

 Caracas, 16 de mayo de 2013
 
“¡Cuidado!…niña en el jardín…”, novela publicada por La Pereza Ediciones, esta disponible en Amazon.

miércoles, 15 de mayo de 2013

EJERCICIO DE EQUILIBRIO


 
De su nuevo libro, Corazones bajo de las pestañas, la poeta Patricia Serra ofrece a La Pereza una de sus páginas


Sitúa una hoja de papel vertical,
preferentemente frente al espejo, sería el
sol. Ahora reduce tu estatura al tamaño de
una hormiga. Estas al pie de todo lo que
eres, de lo que somos y de lo que decimos.
Es tu turno, debes subir por el papel si eres
amiga de alguna mariposa te puede prestar
las alas, (los amigos siempre prestan las
alas) incluso así es difícil es ascenso. Esta
cuartilla está escrita, hay manchas de tinta,
de lágrimas. Huele a martes de invierno. -
Ya casi llego. Te llamas Mario, soy Malva.
Semillas de árboles, he perdido mis llaves y
estas líneas discontinuas me nublan la
vista. Ves el sol, o sea, el espejo. ¿Estás
arriba? ¿Te has parado en el filo de la hoja?
Debes de tener cuidado es peligroso estar
sobre en hilo en lo alto. ¿Ya puedes ver el
dorso? Ya es hora de bajar antes que el sol
se apague, antes que espejo te traicione o
voltees a mirarte un granito en la mejilla.
Entonces un descuido y… te precipitas
hasta el mar, la muerte quizás. Caminas
vertical por tu vida, sublima y escala cada
latir.


Corazones bajo las pestañas, de Patricia Serra, en Amazon:
 

miércoles, 8 de mayo de 2013

PATRICIA SERRA: UNA NUEVA VOZ LÍRICA


Eduardo Heras León

Un primer libro es siempre una apuesta al futuro:  una joven sensible, a lo largo de sus pocos años va acumulando vivencias, emociones, angustias, soledades y nostalgias., momentos de amor y de alegría, y esos sentimientos a veces complejos y contradictorios, otras veces de dudosa certidumbre, que, a pesar de todo, siempre enriquecen nuestra vida espiritual, no sabemos por qué extraño mecanismo se van transformando en palabras, en voces que nos hablan, en imágenes que exigen su sitio bajo el sol de nuestra imaginación; en una palabra, se convierten en Poesía.

Y he aquí que en ese estado del espíritu nuestra joven siente la urgente necesidad –bien lo saben los que alguna vez la sintieron– de volcar ante el misterio de la página en blanco ese caudal de vivencias. Unas veces controladas por la razón; otras, la mayor parte, dejando correr la imaginación. O más bien dejándose ganar por la materia de los sueños o “de esa sustancia conocida con que amasamos una estrella”, de que hablara Nicolás Guillén.  Y así surge, prístino e individual, el Poema.

Cada día una flor, un niño, una paloma; unas manos, una calle, una ciudad; o simplemente el Amor y la Poesía hacen surgir una palabra nueva, una imagen oculta bajo los pliegues de la sensibilidad, la novedosa visión de una nostalgia. La íntima emoción de la amistad y el Amor, vienen a engrosar cada poema y así –ah, milagro de la creación– va surgiendo, casi sin darse cuenta –compendio de emociones, muchas veces inadvertidas– el primer libro.

La joven Patricia Serra ha escrito su primer libro, Corazones bajo las pestañas  y con él va a entablar su apuesta al futuro. Ella, “inquieta/  abandonada/ rara/ difusa/ expectante/, húmeda/ sola/ lúgubre/ lacerada”/ , comienza su singular periplo por los ámbitos de la Poesía, donde: “Siguen las manos ensartando palabras/ hipnosis de un cementerio que respira/ No atino respuestas/ heladas por la sangre/ mis uñas pulsan las tapas, bajo/ una metamorfosis de lágrimas/ La garganta a punto de escapar/ sus voces en la espalda/ aunando amigos que me enseñen/ la disciplina del silencio”/.

Casi todo el libro está signado por la nostalgia: por la tierna ciudad de su infancia, colmada de mensajes y hermosos pájaros (¿mensajeros de la poesía y la nostalgia?): “Atesoraré palomas/ que se posen en mi espalda/ les tatuaré los mensajes de las cuevas/ que me habitan (…) y le pido a la ciudad que me abra sus puertas/ más allá del mar/”. . No es una nostalgia desgarrada, sino expresada como en sordina, como un susurro deslizado  a nuestros oídos, como si la voz lírica, cubierta con un velo, no quisiera descubrir la íntima raíz de un dolor que la tierra lejana concita: “Yo le dije a La Habana que me esperara/ me diera un indicio/ Ella se fue de una forma urbana/ que no entendí/ sólo escuché un rumor que esparcían/ sus calles (...) Seguí mojando los pies en la calle Línea/ viendo los papalotes en colores/ Sentándome en el Malecón de cada a las olas/ para descubrir el secreto/ La Habana se sienta conmigo/  El sol le pinta una belleza rara en los veranos”/.

Esta joven que caminó las calles que la vieron crecer, que cada día “pactaría oficio con la intemperie”, que tiene “tanta sed de la dulzura”, observa desde el fondo de su corazón a los niños del mundo en crisis, donde cada día desaparecen el amor y la ternura, y se pregunta: “¿Dónde sembraron sus sueños los niños de las calles/ En las tierras áridas/ en los campos minados/ en los hilos de asfalto que borran el verde?/¿En qué luna se guardan tantos ojos llenos/si el destierro los desgarró del vientre?/¿Quién les explicará la culpa o la casualidad?/ Y ahora, sin cambiar ese tono tan personal y entrañable del sujeto lírico, nos regala una hermosa metáfora que retrata mejor que mil palabras a estos niños que son como proyectos inconclusos de seres humanos: “Son mariposas rotas/ esperando golpes de primavera/ alguna vez”/.

Los poemas de esta opera prima de Patricia se despliegan en el campo de batalla de los  recuerdos, “del Amor y otros demonios”, a veces bajo la advocación explícita de Dulce María Loynaz, Gabriel Garcia Márquez, Oliverio Girondo, Nara Mansur y Fernando Valverde,  siempre transparentes, en voz baja, como susurrándonos al oído “cada gota de sudor y amor agazapado/ Las mariposas blancas, nocturnos/ que creía extintas desde mi niñez/ los besos promiscuos entre sombras y lunas/ Me encanta que me digas bella en ese idioma extranjero/ y que mi cuerpo te responda en la distancia/ como un velero al viento”. Y cuando la pasión, como en un rapto parece apoderarse del poema: “Una aurora de orgasmos en los dientes/ tu pene , mis nalgas, los senos, el pelo, las pecas/ los besos/ hacer el amor (…)/, el sujeto lírico difumina la impetuosidad del sexo y  asume el amor como nostalgia, como un hito en la memoria: “(…) y recordar la última vez que te vi / Como se van los novios en los taxis/ los novios en la acera / Con la garganta en la mano y una sonrisa/ Romper los bolsillos de tanto hacer/ o sembrar flores de balcón que sepan amar”.

Patricia Serra, con la impaciencia (y el talento) de una nueva y destacada voz lírica, recorre un notable diapasón de temas y los asume desde una sensibilidad y un oficio impropio de una poeta que se inaugura con este libro, que puede ser el inicio de una obra que deje su huella en la más joven poesía cubana. Ya dije que un primer libro es siempre una apuesta al futuro. Y luego de su lectura, los lectores estarán de acuerdo conmigo en que esta vez Corazones bajo las pestañas ganará esa apuesta.  
Corazones bajo las pestañas, de Patricia Serra, en Amazon:

domingo, 5 de mayo de 2013

AUTORES FINALISTAS DEL PREMIO INTERNACIONAL DE CUENTOS PARA NIÑ@S LA PEREZA 2013


El jurado del Premio Internacional de Cuentos para Niñ@S La Pereza 2013, tiene el placer de anunciar la lista de los autores que han resultado finalistas del concurso, en el orden en que sus obras fueron recepcionadas. Los cuentos de todos esos autores conformaran el libro que La Pereza Ediciones editará con los resultados. En los próximos días, cuando sus deliberaciones culminen, el Jurado anunciará los nombres de los autores ganadores.

Los autores finalistas son:

Sara Gisbert Beneito
Leslie Urdanivia
Liliana Romero
Ileana María Rodríguez Ramos
Clara Álvarez Domínguez
Nieves Fernández Rodríguez
Patricia Suárez
Nelson G. Martínez Hernández
Azucena Ordoñez Rodas
María Rocío Cardoso Arias
Cristina Fernandez Valls
María Parra Martí
María José Gil Benedicto
Miguel Mosquera Paans
Isabel Lizarraga Vizcarra
Miren Juaristi Zabaleta
Jorge De Jesus Buitrago Muñoz
Benito Pastoriza Iyodo
Analía Verónica Juan
Emilio Pulido Medina
Tania Carolina Uribe Jimenez
Maria Luisa Agost Suarez
Mariana C. Zinni
Marisa Alonso Santamaría
Abel Adrián Castro Sablón
Desirée Jiménez Sosa
Emanuel Franco Gómez
Elaine Vilar Madruga
Julián Salcedo
Ana Laín Lázaro
Isbel González González
Mildre Hernández
Amaya Nogueira Rodríguez
Luciano Mario Hernández Dufou
Lara Suárez-Mira Reija
Manuel L. Sánchez Montero
Jorge Arturo Escribá Chávez
Isabel Gamarra García
Miguel Dante Ildefonso Huanca
Úrsula Melgar Arjona
Daymé García Rodríguez
Eduardo Frias Etayo
Paola Andrea García Noboa
ElmanTrevizo Higuera